Categoría: Mensajes

Muchos se alejan de Dios por aquellas personas que llevan su mensaje acomodándolo a su propio beneficio, Diciendo una cosa y haciendo otra muy diferente, a este tipo de personas el Señor los llama Escribas y Fariseos! Mateo 23 1:2 .

Quieres vengarte de alguien? Te han hecho daño y han herido tu corazón? tienes un profundo dolor por que «alguien » dañó tu vida y aunque fue hace tiempo sigues con ese dolor en tu corazón? … en lo mas profundo piensas: Cómo puedo hacer para que esa persona pague lo que me hizo o quisieras verla mal?

No dejes lugar para el pecado en tu vida. Un corazón vacío es un terreno fértil para que crezca el pecado. Enfréntate decisivamente y sin demora al pecado cada vez que tropieces con él.

Ver una película en televisión, leer algo que nos enviaron por las redes sociales o simplemente ver algo que no debes puede ponerte en peligro. La mejor forma de huir de la tentación es no abriendo la puerta y una de las puertas son tus ojos.

La gente justa manifiesta mansedumbre aun cuando enfrente la hostilidad de las autoridades civiles.

La actividad constante es muy apreciada en nuestra sociedad. Las personas ambiciosas son admiradas y premiadas por su interés y dedicación a sus profesiones. Las madres que hacen malabarismos con todas las actividades de sus niños, y que al mismo tiempo se ocupan del hogar y del trabajo son catalogadas como supermadres.

Dios utiliza las dificultades para desarrollar la FE. Gedeon estuvo dispuesto a creerle a DIOS y a salir contra un ejercito cuatro veces mayor que el suyo. Dios puede pedirnos que hagamos algo que no parece razonable, pero si sabemos con confianza que viene de EL, sigamos su dirección.
Aunque los caminos de Dios pueden parecernos ilógicos, su Sabiduria y su Poder, son mucho mayores que los nuestros, y podemos confiar en su plan. Ya oraste para pedir dirección al Padre?

«Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre. Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis.» Apocalipsis 13:16, 17, 18, que curioso, como que todo concuerda ¿no?